Hoy,
día de los trabajadores, quiero acordarme de ellos. Aunque ya son historia, y
olvido, yo quiero recordarlos, doblados sobre los trigales, con la hoz y la
zoca –para proteger la mano izquierda cerrada sobre los tallos -, con el
sombrero de paja que olía a un sudor antiguo, de antes, como de vieja estirpe
adaptada al fragor de la intemperie.
Yo los conocí, y sus sudores, y sus olores, aún permanecen, indelebles,
en la memoria. Sus olores viejos, ancestrales; y los del botijo y el
gazpacho, que aliviaban la sed y el cansancio; y el de las mulas que tiraban
del carro, y luego del pedernal en la era, con su aroma a polvo de trilla,
venteado al atardecer, cuando ellos ya guardaban la hoz y la zoca, y trataban
de levantarse, de erguir sus columnas vertebrales, ya dobladas, curvadas con
tantas siegas, bajo tantos soles.
En el verano era la siega, y las fatigas en las vegas y en las huertas;
y en invierno la varea de los olivos, y el arrastre y la carga de las mantas,
las espuertas y los sacos rebosantes de aceitunas. Entonces prevalecían los
aromas de la lumbre en el olivar, de las aceitunas machacadas en los caminos
bajo las ruedas de los carros, y el olor intenso del aceite virgen que extraían
en los días y las noches con el trajín incesante de las ruedas del
molino.
Y, durante todo el año, estaban los demás afanes del campo y de la
tierra, dependiendo de las estaciones, de sus aires y sus lluvias.
A veces no había jornal, y ellos tenían que ir a la plaza, o a la taberna,
a buscarlo. Entonces volvía el miedo a la necesidad y al hambre de los hijos,
ya inoculado en sus memorias, aún vigente en aquellos años. Como también lo
estaban el silencio y la resignación acallada, durante aquella interminable
posguerra. Hasta que la modernidad los relegó a la trastienda de la historia, y
diluyó su recuerdo junto al de aquel mundo rural con el que estaban
enraizados.
Por eso
hoy, en el día de los trabajadores, quiero recordarlos. Porque están en mis
genes y en mi memoria. Y porque sigo empeñado en preservarlos del olvido.
Francisco de Paz Tante
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